¿Sos inseguro y te cuesta poner límites? Probá con estos consejos

Los límites son un tema difícil para todos/as, nos sentimos mal cada vez que tenemos que trabajarlos, ¡pero hay que hacerlo aunque cueste! Es así que los límites son reglas de comportamiento. Acuerdos para la convivencia. Nos dan un encuadre para estar cómodos y ser mejores personas.

Los límites los sentimos claramente cuando alguien nos dice basta, cuando vienen de afuera. Pero, ¿qué pasa cuando somos nosotros los que tenemos que decir 'hasta acá' y no podemos? "Un límite puesto a tiempo, con cariño, es muy sanador. Los límites marcan tiempo, espacio y forma de estar o compartir con otros. Si te cuesta poner límites, practicá formas de expresar lo que sentís. Si te caen muy mal los límites que te ponen los demás, probá practicar la empatía o pensar en qué te estás equivocando. O revisar qué idea tenés de la convivencia", destacó la licenciada en psicología, Analía Carril (M.N. 33.758), en el aire de Médico de Familia.

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En esa línea, la especialista invitada ahondó en que "los límites me permiten construir un lugar seguro. Si sos inseguro, en general, borrás más tus límites. Te dejás llevar más por lo que te piden los demás. No querés enfrentarte. Las personas inseguras no ponen límite porque les cuesta enfrentar la reacción de los demás. Decir 'sí' y 'no' cuando realmente tengo ganas de decir 'sí' y 'no' ... El límite es parte de nuestra identidad. Un límite es saludable".

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