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Imágenes sexuales o violentas en la mente: cómo lidiar con los pensamientos intrusivos
La licenciada Analía Carril realizó un amplio análisis sobre la mente y los pensamientos intrusivos. "Es como algo contrario a lo que habitualmente pensamos", destacó la especialista.
4 de julio de 2023
Estudios aseguran que, en promedio, una persona puede llegar a tener miles de pensamientos diarios. ¡Se calculan más de 5.000!
En tanto, la mayoría de esta actividad pasa desapercibida por la propia conciencia. Pero algunos a los que le llamamos intrusivos, nos llaman la atención, no parecen nuestros, nos agobian. Es así que, muchas veces, traen ideas catastróficas y cambian nuestro estado de ánimo. Incluso, puede suceder que ciertas veces modifiquen nuestra conducta.
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"El pensamiento intrusivo, por definición, es un pensamiento egodistónico. Quiere decir, no se parece a cómo pensamos en general. Es como muy contradictorio a cómo somos las personas en el día a día", destacó la licenciada en psicología, Analía Carril (M.N. 33.758), en el aire de Médico de Familia. En ese sentido, la especialista aseguró que "el 95 por ciento de los pensamientos intrusivos no pasan a la acción".
Respecto al accionar de dichos pensamientos, Carril precisó que se trata de un "instante". "Es un segundo en tu mente que cambia, como si le sacaran un cable y le pusieran otro. Es automático. No depende de mi razonamiento. Es una escena rarísima que aparece, se va y, muchas veces, es repetida. Ahí es donde tenemos que consultar. Hay bastantes consultas sobre este tema. Hay mucha más gente que lo sufre a la que consulta", adicionó. Y sumó: "Son pensamientos que generan una emoción negativa: miedo, ansiedad y nerviosismo. En general, esos pensamientos son agresivos, violentos, obscenos y hacen que te detenga tu pensamiento o tu accionar. Tienen esa facultad de interrumpir tu diálogo interno y sacarnos de foco".
Botiquín - pensamientos intrusivos
- Estar atentos y observar la frecuencia, la intensidad y qué emociones se asocian a los pensamientos intrusivos.
- No asustarte. No pensar que sos una mala persona por pensar alguna vez algo aberrante.
- Que pienses algo grave o catastrófico no significa que obligatoriamente se pueda concretar.
- No entablar una conversación con esos pensamientos. Tratar de ser indiferente a ellos.
